Nos transportamos a un divertido episodio que ocurrió hace unos 20 años en Cali. En aquel entonces, Max era el protagonista de los pronósticos más impredecibles de la ciudad.
Con su inigualable entusiasmo y una sonrisa radiante, Max anunciaba que el día siguiente sería soleado y perfecto para disfrutar al aire libre. Los ciudadanos, confiados en su palabra, salían de sus hogares con gafas de sol y ropa veraniega, solo para encontrarse con un diluvio torrencial que los dejaba empapados de pies a cabeza.
Pero la historia no terminaba ahí, porque cuando Max aseguraba que el cielo estaría nublado y que la lluvia sería inminente, el sol salía radiante, como si se burlara de sus predicciones. Los habitantes de Cali comenzaron a preguntarse si el clima estaba jugando una broma o si Max era el maestro de la meteorología al revés.
Aunque algunos se mostraban desconcertados y llegaban tarde a sus actividades planificadas, la mayoría tomaba estos pronósticos contradictorios como una fuente inagotable de risas y anécdotas. Max Henríquez Daza se había convertido en el meteorólogo más famoso de la ciudad, no por su precisión, sino por su capacidad para sorprender a todos con sus pronósticos al revés.
A pesar de los años transcurridos, los habitantes de Cali aún recuerdan con cariño aquellos momentos de incertidumbre meteorológica protagonizados por Max. Sin duda, su peculiar estilo y su capacidad para desafiar las leyes del clima hicieron de él un personaje inolvidable en la historia de la televisión local.
Hoy en día, Cali sigue extrañando el toque cómico y sorpresivo que Max Henríquez Daza aportaba a las noticias regionales, recordándonos que, a veces, la imprevisibilidad puede ser la mejor manera de disfrutar el clima. ¡Que llueva cuando diga sol y que salga el sol cuando pronostique lluvia! Max Henríquez Daza, el meteorólogo que desafió todas las expectativas y nos hizo reír en cada pronóstico.